Como broche de oro de su icónico ciclo, la diva de los teléfonos conversó con los jugadores del certamen y se sorprendió al recibir tanto cariño
El domingo por la noche, Susana Giménez se despidió de la pantalla chica con una serie de invitados de lujo. Tras tener en su diván a Tini Stoessel y a su propia versión más joven realizada con Inteligencia Artificial, la conductora decidió cerrar con la participación de Santiago del Moro. En ese marco, el presentador de Gran Hermano (Telefe) la invitó a charlar con los integrantes del reality y causó un revuelo de emociones dentro de la casa.
Entre gritos y aplausos, los competidores dejaron en claro su emoción al ver a la diva de los teléfonos por el monitor de la televisión. La reacción que se destacó fue la de Keila Sosa, quien desde su ingreso al certamen dejó en claro su fanatismo por ella. “Te amo con todo mi corazón, Susana. Sos mi ídola, por favor. Te amamos”, expresó, con la voz quebrada, al tener la oportunidad de charlar brevemente con la animadora en vivo.
Acto seguido, del Moro se metió y le comentó a Giménez: “Keila entró a la casa cantando tu canción. Dale, cantala”. El nerviosismo del momento no le permitió a la joven recordar la letra, pero tanto el anfitrión del ciclo como sus compañeros la ayudaron a entonarla con rapidez. “¡Qué bien! ¡Bravo! Buenísimo, chicos. Mucha Suerte”, expresó la actriz, quien se emocionó por el gran recibimiento de los jugadores. Tan solo unos segundos después de presenciar dicho gesto, no dudó en indagar sobre sus días adentro. “¿Cómo va todo ahí? ¿Se llevan bien?”, aventuró en alusión a la convivencia que se encuentran afrontando desde que comenzó la competencia.
No recibió respuesta por parte de ellos, pero Santiago se metió y explicó: “Tienen un baño para los 24″. Descolocada, la conductora exclamó: “¿Por qué? Si te hacés pis, ¿tenés que hacer cola?”. Entre risas, el presentador del certamen le comentó que esto era cierto. “Me parece terrible, tienen que comprar otro”, agregó, con un tono jocoso, al imaginarse compartir el mismo espacio con esa cantidad de personas.
Mientras intentaba entender la modalidad del juego, Keila volvió a tomar la batuta del grupo. Al borde de las lágrimas, la muchacha oriunda de la localidad de Tigre expresó: “Ay pará, Susana, te amo. Soy tu fan número uno. No lo puedo creer. Te amo”. Una vez más, ante la reacción de la muchacha, su ídola no dudó en responder: “Qué amorosa. Suerte para todos”. Infobae
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